La Cacería

la caceriaEste filme responde al circuito de  cine que nunca podré disfrutar en pantalla grande en la Serena, donde resido, porque  dramáticamente en esta ciudad no hay espacio para el encantador y bien facturado cine europeo. Por eso cada vez que viajo a Santiago, cuya soberbia oferta cultural da cuenta del centralismo, una actividad imprescindible es optar por la cartelera de cine del viejo continente.

“La Cacería ” es la nueva propuesta del danés  Thomas Vinterberg quien una vez más  nos puso al borde del pleno sufrimiento, al igual que hace  unos años con su aclamado filme “La Celebración”.

En ambos, este director aborda el tema del abuso sexual, sólo que en esta oportunidad comete una gran crueldad con el espectador al hacerle compartir el sufrimiento y la verdad del protagonista.

La trama no la relataré. hay que sufrirla en el mejor sentido del término, porque allí desafortunadamente radica el mérito de la película: hay que participar de la martirización de Lukas,  el protagonista excelentemente interpretado por  Mads Mikkelsen, quien llegó a la cartelera chilena ya con la palma del mejor Actor en el Festival de Cannes.

Sólo daré algunas luces: se aborda la pedofilia, tema que hace algunos años ya desarrollaron excelentes cintas americanas: La Duda” ((Meryl Streep, Philip Seymour Hoffman,Amy Adams) y “Río Místico” (Sean Penn, Tim Robbins, Kevin Bacon).

Estas tres producciones dan una diferente mirada a este delicado tema y cada una representa incuestionables méritos.

Sin embargo, ni “La Duda” ni “Río Místico”  dejan al espectador atrapado en el sufrimiento del protagonista como lo logra “La Cacería”.

Un elemento adicional-  recurrente en el cine europeo- es la propia interpretación que hará cada asistente a la sala sobre la suerte que correrá Lucas y cuál es la lectura que puede hacerse de las últimas escenas.

Desde esa perspectiva, Thomas Vinterberg, quien es un cineasta de la línea de Lars Von Trier ( Dogma 95 ), cuya estructura no está aquí presente, maneja con maestría la oportunidad que muchos directores otorgan al espectador para conjeturar con el final y/o  siguientes secuencias de la trama.

Como todo el cine europeo, esta cinta también nos otorga el deleite del manejo fotográfico, con acercamientos para interpretar los  gestos y miradas que constituyen un activo imprescindible del buen cine.

Esto último, ya es marca de la filmografía del viejo continente, y está dado por el ritmo pausado característico de este cine.

La fotografía está muy bien  aprovechada en  la pequeña menor también protagonista, cuya actuación  también contribuye a la dosis de angustia que genera esta cinta.

Si es gozador de  buenas películas, valora las propuestas europeas y está dispuesto a sufrir, recomendamos de todas manera “La Cacería”.

Veála, después de todo el sufrimiento está a la vuelta de cada esquina.

 

 

Susana Pozo Pizarro, es Periodista (UCh), Magíster en Información Económica. A nivel profesional ejerció en formatos de Televisión, Radio, Periódico y Revista. También se desempeñó en Comunicación Corporativa y culminó su carrera como Editora y Columnista del sector de Economía en Diario “El Mercurio” de Valparaíso. A nivel académico ocupó cargos en la Universidad de La Serena como académica, Directora de la Escuela de Periodismo y vicedecana de la Facultad de Ciencias Sociales y Administrativas. En 2008 recibe el Premio “Elena Caffarena” que otorga el Gobierno para reconocer a mujeres destacadas en su ámbito profesional. Hoy es columnista del Semanario “Tiempo” de La Serena y maneja este sitio para analizar la actualidad así como otros temas de interés. Nos estamos acercando a 1.800 seguidores en twitter y un número significativo que nos siguen a través del contacto directo y de correos. Nuestro interés es otorgar análisis independiente y acogemos comentarios que pueden observar enfoques distintos y opuestos al nuestro.

Susana Pozo – who has written posts on Agenda Alternativa.


One Comments

  • Rodrigo Hananías 17 / 12 / 2013 Reply

    La vi. Muy buena película. Y la comenté con una Jueza, quien me contó que situaciones así son muy frecuentes, que a la hora de apreciar la prueba muchas veces le parece que algunos testimonios son totalmente inducidos, y que surgen dudas más allá de lo razonable para condenar.
    El otro día, leyendo las cartas de El Mercurio, apareció una que hacía mención a esta película. La escribía un hermano (me parece) de un acusado de abusos.
    Gran película. Pero sí, sufrí bastante viéndola. Y ya cada vez me está gustando menos sufrir con las películas. Veo pocas porque mis pequeños hijos consumen todo mi tiempo, por lo que quiere relajarme si veo una. No sufrir!

Agregar un comentario