Normalmente no me gusta hablar de géneros. Lo femenino y lo masculino cae por el peso de la naturaleza  de cada uno. Y no hay más. Que las mujeres quieran creer que  son más poderosas porque están abarcando espacios que  hace algunos años eran exclusivos de hombres, es una bobada que no ha hecho sino  que  el llamado sexo débil caiga  en su propia trampa y exacerbar la comodidad y muchas veces la irresponsabilidad masculina: en críanza de  su prole o en asistir  el hogar.

¿Y quiénes son culpables de todo esto? Las propias mujeres y su modelo machista para  educar a sus hijos.

Hecho este preámbulo, que tiene sólo carácter de contexto porque no es mi interés  reflexionar sobre el tema, el eje de esta columna es llamar la atención sobre dos propuestas cinematográficas cuyo peso protagónico está centrado en mujeres.

La última- que luego analizaré en columna aparte es “Blue Jasmine”-  la nueva producción  de Woody Allen que podría situar a Cate Blanchet como ganadora del Oscar 2014. “Blue Jasmine” cerró el año cinematográfico 2013 en temática femenina. Abrió este año el filme chileno “Gloria”, candidato ahora al Premio Goya, luego que se  cayera de las postulaciones al Oscar.

Pero ya ha  recibido suficientes estímulos. Paulina García- una actriz que ha sido capaz de “levantar” el pelo hasta las más  bostezantes teleseries-  ya lleva tres galardones compitiendo en  festivales internacionales y al menos otros 6 su Director Sebastián Lelio.

“Gloria” es la típica mujer que  ya va trepando hacia la cincuentena en edad y su vida sentimental es un desastre: está sola y sus fugaces encuentros o esfuerzos por  la búsqueda de un compañero quedan solo en personajes que poco y nada valen, que  nada tienen que ofrecer en materia de compañía  real y efectiva que una pareja pueda brindar: con calidez y comunicación. Lo contrario, es la soledad que se  vive  junto a una persona y que es- a mi juicio- la peor compañía, la más cruda realidad.

Por eso el final de la cinta, que algunos espectadores  poco comprenden, es la decisión inteligente de esta Gloria quien finalmente asume cuál es el real  sentido de la soledad y cuánto puede enriquecer su vida si finalmente se focaliza en ella como ser humano.

Gloria o Paulina García- hoy candidata a los Premios Goya-  y ya triunfadora en los Premios de Mejor Interpretación Femenina del Festival Internacional de Cine de Berlín; Mejor Actriz Principal de los Premios “Pedro Sienna” e igual galardón en Hawaii- tiene su imán en el planteamiento que Lelio hace del tema central: la soledad en compañía, un mal que no sólo es privativo de las mujeres.

Y por cierto que al manejo de cámara de  Sebastián Lelio se une Paula García, formidable actriz. Ambos representan un avance  en las temáticas que  normalmente abordan los realizadores cinematográficos chilenos.

¿Irán quedando atrás personajes como los de la escritora Jane Austen (“Orgullo y Prejuicio”) o la atormentada y banal Scarlett O´Hara de “Lo que el Viento se Llevó”? Es de esperar que finalmente se  las lleve el viento.