Al ministro de Hacienda le falló la Aritmética
Lo pillé y eso que era porra en la asignatura
Cuán preocupante resulta que al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, le falle la lógica aritmética
¿Qué queda entonces para los cálculos que podríamos hacer chilenos menos especializados que él, quien tiene el deber de hacer estimaciones coherentes?
Lo digo porque a propósito de la defensa cerrada que el secretario de estado hizo ayer, con el objeto de mantener el magno presupuesto asignado para hacer brotar nuevas líneas en el Metro y a la vez depredar el 50% de las asignaciones para regiones por la Ley Espejo, dijo que en regiones se invierte 2,5 veces más por persona que en la Región Metropolitana.
Bien acertada la estimación. Peor es que la creamos.
El titular de Hacienda deja en primer lugar de lado un principio básico para plantear cálculos cuantitativos comparativos y es el que exige que las bases de comparación sean análogas.
¿O estaré equivocada al señalar que la Región Metropolitana es UNA sola y el resto de las regiones son CATORCE? Y eso da una enorme desproporcionalidad que ameritaría aun una mayor diferencia en el gasto per cápita por quienes hacemos patria viviendo en regiones, porque son 14 regiones debiendo recibir una proporción equilibrada de obras para su desarrollo.
Por cierto, pues ministro, que sobre esa base en regiones el gasto per cápita debería ser sustancialmente mayor: UNA contra CATORCE.
La estimación ministerial está hecha bajo el prisma de la falacia política.
Ahora, como toda la política de tendencia centralista lleva a que cada vez más se instalen habitantes en la Metropolitana y torpemente las regiones tienden a despoblarse, capaz que el hacinamiento demográfico sea mayor en la RM versus el conjunto de las 14 restantes.
Chile, tiene perfil de desnutrido o de Sra. en estado de gravidez: delgadito hacia sus extremos (regiones) y con una inmensa panza metropolitana.
Ministro y parlamentarios han usado sólo falacias para explicar lo inexplicable: que a las regiones se les está esquilmando el escaso presupuesto que reciben para financiar megaproyectos en la RM.
Un parlamentario justificó la extracción del 50% de la Ley Espejo para construir hospitales señalando que las regiones serán las que se beneficiarán de los planteles.
Hablemos eso después de conocer la nómina final de centros de salud que finalmente formarán parte de la promesa de campaña.
Esa nómina es un misterio: ha variado cada vez que se habla de ella y se instrumentaliza sobre el proyecto que en definitiva se ejecutará porque sólo algunos de los centros estarán tiqui taca, para ser usados en 2018, cuando finalice esta Administración. Otros, apenas serán un bosquejo.
Cuando dispongamos de esa lista veremos la proporcionalidad de aquellos que se levantarán en la Región Metropolitana versus los que se instalarán en el resto del país.
Lo razonable es que si se construyen 20 hospitales. la distribución equitativa sería 1 centro por cada Región…si colocamos parte de los recursos.
Le apuesto que no.
Los zarpazos lanzados desde el nivel central a los dineros regionales a propósito del debate presupuestario 2016 dan cuenta que el proyecto de descentralización- otra promesa fallida- es un cuento navideño: no hay cultura ni mentalidad descentralizadora, como una pésima estrategia de la unidad/país en momentos en que el mundo da cuenta de la escasa, casi nula empatía existente a nivel internacional hacia la causa chilena en la contienda planteada por Bolivia, tema que abordaré en la columna de este viernes en el Semanario “Tiempo”.
El atentado presupuestario contra regiones fue tema además del artículo publicado la semana pasada en el mismo periódico y que luego publicaré en estas páginas.
¿En qué andarán las bancadas regionales que no defienden a los chilenos que les otorgaron los sufragios para ocupar un sillón parlamentario?
Vaya Ud. a saber.
Pero no se preocupe, ya aparecerán golpeando puertas, recorriendo ferias de abasto, besando guaguas y tomando tecito con la añorada Doña Juanita del ex Presidente Lagos.
Pero, dejando de lado la ironía, molesta que el mundo político siempre trate de justificarse con falacias para explicar la indiferencia y desinterés en el mayor desarrollo regional y apuesta a colocar la mano entera dentro de la boca.Lamentable.
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