Aseguremos Calidad Educacional para nuestros niños más pobres
Este es un factor de permanente resistencia entre los profesores
Los maestros de los colegios públicos llevan más de 2 semanas movilizados, tras el objetivo que se baje el Proyecto de carrera docente actualmente en tramitación en el Congreso.
Ese propósito ya lo lograron: establecieron una mesa de negociación con la participación del Ministro Eyzaguirre, con el cual ya se ha consensuado una propuesta que no se ha difundido y que los docentes ahora exigen que se vote en las bases.
¿No hubiese sido suficiente con el logro de la primera finalidad- bajar el proyecto desde el Parlamento- para que los profesores retornaran a sus aulas? Si tenemos en cuenta que el 50% de planteles municipalizados correspondiente a más de 2.000 colegios en todo el país, donde se educan los más pobres, están sin clases y a nadie preocupa.
Pero habrá que esperar que los profesores re-examinen en la base el Proyecto Docente que debiera contener dos ejes primordiales: recuperación de mayor conquista docente salarial, pero también aseguramiento de la Calidad en el Desempeño, que en proyecto inicial que el Gobierno envió a discusión, se expresó en Certificaciones y Evaluaciones atadas al progreso en carrera docente.
Más de 10 son las objeciones que han formulado los maestros en torno a la propuesta correspondiente a la segunda fase de Reforma Educacional que debió ser prioridad uno. Nuestro reparo es que las demandas que movilizan a los profesores están en su mayoría referidas a eliminar los instrumentos que validen su buen desempeño.
Así, el Colegio de Profesores se opone a las Certificaciones, inicial y promocional; también a la Evaluación Profesional así como que se instalen asignaciones de Desempeño Variable Individual, porque ha expresado claramente que no desea generar la competencia entre iguales. ¿Por qué no?
Despojar el proyecto inicial de instrumentos destinados a validar en el curso de la trayectoria del profesor su competencia y su crecimiento representa una vez más dar la espalda al aseguramiento de la calidad.
En el petitorio, argumentan que las certificaciones representan desconfianza y control.
Toda actividad en su desarrollo debe ser validada. No existe la actividad profesional que no requiera actualización, modernización, innovación.
Pero la evaluación docente ha sido ya históricamente un muro de resistencia entre el magisterio.
Eso a pesar que en el caso de los maestros, esta exigencia es de particular relevancia, en tanto la Calidad representa el mayor cuestionamiento en los resultados actuales en la formación de las nuevas generaciones, a pesar de su trascendencia como factor impulsor de la movilización social de los grupos socio-económicos de menores recursos.
Comprendemos en toda su dimensión las aspiraciones salariales de los docentes, un desempeño que nunca, en resguardo del desarrollo del país, debió menoscabarse en sus conquistas salariales.
No obstante, también debe preocuparnos que los alumnos de menores recursos reciban una educación de excelencia, si es que es cierto nos preocupa la ignominiosa inequidad social existente.
Y habrá por tanto que preguntarse ¿por qué el sector más desprotegido de familias chilenas no tiene derecho a recibir la certeza que los maestros que educan a sus niños cuentan con calificaciones actualizadas para el desempeño de su importante labor?
En el petitorio de 11 modificaciones que demanda el Colegio de Profesores hay una sola que va en dirección a la Calidad Educacional y se relaciona con el número de alumnos por aulas.
Este paro a nadie parece preocupar, como sí ocurre con huelgas en sectores productivos sobre los cuales políticos y empresarios empiezan a estimar los costos monetarios de la paralización y a presionar porque en nombre de las pérdidas la movilización concluya.
En el caso de la movilización docente no se miden el impacto y consecuencia en los niños. No hay similar raciocinio.
Así de indiferentes somos frente a la formación de quienes menos voz tienen para representar su menoscabo social.
El equilibrio entonces, entre conquistas salariales de los docentes e instrumentos que validen la calidad educacional.
Comments
No comment