Sigue siendo un Drama Vivir en Región

Quienes afirman que en Chile  no hay ciudadanos de  primera y hasta de cuarta  clase o están ciegos o no quieren ver.

Muchos aspectos de la vida cotidiana nos hacen diferentes y esa diversidad puede ser aceptable, en tanto los aceptamos y estamos  cómodos  con nuestra elección. La uniformidad es una monotonía que no hace bien a nadie.

Pero en tanto las diferencias representan carencias, falta de oportunidades y pésima calidad de vida,  ya entramos en el campo de la injusticia, de los privilegios  y de la incorrecta distribución de recursos.

El nuevo cierre de la Escuela de la Greda en la V Región, que debió ser decretado ayer por el Ministerio de Salud, así como la persistencia de la sequía en la IV Región, coloca en plena vigencia un artículo que ya escribí hace casi 2 años- noviembre de 2013- en que  uní el drama que vivían los habitantes de la Greda y los pobladores de Punitaqui, en la provincia del Limarí.

Decíamos sobre la comuna de  La Greda que no sólo  tenían que enfrentar una endémica polución proveniente de  una industria pública- la Fundición Enami hoy Codelco-  les instalaron una termoeléctrica.

Ayer su colegio, donde los  niños se desmayan como consecuencia de los altos niveles de contaminación, debió ser clausurado por las emanaciones provenientes de  una planta de residuos.

40 niños  sufrieron  intoxicación, porque inhalaron sulfuros  y ácidos orgánicos volátiles.

No es que los menores se aproximaran a oler, sino  que cometieron el “pecado” de respirar.

¿Cómo se les ocurre respirar?, habría que afirmar con ironía.

El plantel fue levantado hace 2 años porque debió ser alejado de los centros de polución, pero sobre el flamante nuevo edificio, los padres advirtieron que igual en el sector había contaminación.

El Gobernador  Provincial admitió hoy que desde  su inauguración, el colegio no ha sido revisado, pese al amenazante ambiente en que está instalado.

En Punitaqui, en la IV Región, todavía deben estar  muriendo de sed como señalamos en el artículo, porque al revisar hoy las  páginas del Centro de Estudios para Zonas Áridas, CEAZA, se señala que pese a las lluvias que se dejaron caer este invierno en la región, los déficits existentes mantienen el drama de la sequía.

El informe indica que no ha sido suficiente el 13% de superávit de precipitaciones que se registra a la fecha.

Obvio, si la base de comparación es mínima, tras casi 10 años de sequía.

Veamos las cifras del Ceaza: los caudales  tienen  un déficit del 60% , en tanto en los embalses, esa medición alcanza un faltante de  un 81%.

La nieve a nivel regional es  deficitaria en un 12%.

Según Ceaza, las tres cuencas- Elqui, Limarí y Choapa- presentan  valores muy menores con respecto a los históricos- del 37 al 43%.

Asi, el informe indica que Elqui registra apenas un 19,3% de su capacidad máxima; el Choapa ha logrado  acumular sólo el 28,1% y el mayor drama es en la Cuenca del Limarí que está con un llenado al 8,1% de su capacidad.

El valor promedio regional es sólo de un 11%, cifras que no  son ni para bailar cueca ni brindar con chicha.

Invito a  los nuevos lectores a leer el artículo que titulé “El Drama de  ser Región” que aunque  data de hace 2 años, hoy hemos ratificado que  nada ha cambiado

El Drama de Ser Región

Publicado en Semanario “Tiempo” en Noviembre de 2013

La Greda, una humilde localidad situada en Puchuncaví, (V Región) es vecina a Fundición Ventanas de Codelco, cuyo funcionamiento arruinó la agricultura local y ahoga a sus pobladores con polución. Eso hace  una empresa Pública.

La autoridad desplazó varios kilómetros la escuela porque los niños enferman de contaminación. Los pobladores aseguran que el nuevo establecimiento no está a resguardo de la suciedad que ningún chileno se merece. Muchas veces crucé ese sector y era un paraje desolador, parecía arrancado de un filme sobre el fin del mundo. No exagero. Todas  las mejoras en esa Industria de la Contaminación no han ayudado mucho al punto que los pobladores se desmayan. Y porque a La Greda le añadieron una Termoeléctrica. ¿No será demasiado?

Pero la tragedia de los niños de la Greda no es su vecindad con una Fundición y una Termoeléctrica. Su mayor drama es situarse en una  de las 14 regiones cuyos problemas no generan mayor impacto.

En la IV Región se cumplió ya el octavo año de sequía, pero vibramos con otros acontecimientos: la “Roja” o debates presidenciales que mucho no aportaron, han sido temas de mayor interés. Punitaqui está dramáticamente unida con La Greda. En esta última se ahogan con la polución; en Punitaqui literalmente se mueren de  sed. Es una de las tantas localidades interiores de Coquimbo asoladas por la sequía. ¿Y a quién preocupa definir y emprender una solución más radical? Los bonos sequía distribuidos son meros paliativos.

Punitaqui vive la guerra del agua, abastecida a punta de camiones aljibes, con escuelas sin el recurso vital y con un complejo de embalses que ya llegó a su cota mínima.

Punitaqui es una de las zonas empobrecidas de la IV Región, pero esta sequía que no amaina, la ha llevado a una mayor precariedad. Ya no vale mirar al cielo e implorar por pluviosidad. ¿Buscar en napas subterráneas? Los especialistas deben hacer su trabajo.

La IV Región es promovida como la de cielos más limpios. Bien por la Astronomía y el Turismo. Pero en rigor, tendríamos que decir que  es también una de las regiones con suelos deplorables, producto de la sequía, la erosión, la desertificación. Y también con sus ya escasos cursos de agua muy contaminados por la actividad minera.

Por paradoja, en ese deteriorado suelo está oculta la “solucionática” a tan dramática “problemática”. Invento una rima,     mientras en La Greda se ahogan y en Punitaqui tienen Sed.

¿Qué será peor? ¿Mi ridícula rima o el drama de ser pobres comunas regionales? Claramente lo último, a pesar de lo grotesco de mi rima