¿Y por qué?

¿Cuándo estamos obligados a brindar explicaciones?

Cuando nos  obligan o cuando por ética nos sentimos comprometidos a explicar.

Pero la ética ya no se estila, menos en la política que perdió el decoro y hace mucho que los partidos, parlamentarios y gobernantes responden sólo ante sí sobre los desatinos  e irregularidades que cometen.

Y así hay varios entreverados con la Justicia que apuestan a la benevolencia y el Alzheimer del elector: Meo recuperó el habla para anunciar su tercer intento; Parisi insistirá aunque nunca dio explicaciones por las irregularidades ante el Servel.

Unas buenas  explicaciones son las que debería dar  también el Partido Socialista que  prometió Primarias Ciudadanas a militantes e Independientes para  definir su abanderado  de julio próximo pero que el pasado fin de semana resolvió borrar este compromiso con el codo. 

Pero lo cierto es que el PS no tiene explicación que brindar: ninguno de sus candidatos  ha logrado despegar  en las encuestas y por tanto ha surgido el caos, una entropía, complicada de explicar a los militantes, porque ante el desastre, el Comité Central de la  colectividad se adjudicó la misión de resolver entre el militante más poderoso que hizo operar su maquinaria- Ricardo Lagos Escobar-o un Independiente, es decir, Alejandro Guillier.

Eso da cuenta que al interior del PS  hay  una bolsa de gatos voluminosa.

Que no hace sino reflejar lo desquiciado que está el mundo político.

Y aburrido para el resto de la Ciudadanía.

El único suspenso que  resta al interior del PS es ver que tanto peso tiene el laguismo para resistir las voces disidentes y  para que el propio Lagos decida no exponerse  a una derrota.

Ya sea ante Guillier o ante los restantes abanderados de la Nueva Mayoría en julio próximo.

Resulta curioso, porque Guillier es un candidato al que vemos débil.

No le hemos escuchado nada sustancioso, “enjundioso” dirían  las abuelas de antaño.

La semana reciente se coronó con frases insólitas.

Sobre Beatriz Sánchez- ahora ungida precandidata de Revolución Democrática y Movimiento Autoinomista- ya había dicho “a esta ‘cabra’ le había echado el ojo para vocera, pero me la perdí”.

¡Ídolo del Machismo!

Y según  un  matutino, en el  libro- entrevista que  le preparó el  periodistaRaúl Sohr, declaró que “sería el único Presidente que llegaría al Poder por su meritocracia”: ¡Plop!

Tras la baja experimentada en las encuestas, Guillier afirmó que “no ha hecho estudio científico“ sobre su estancamiento.

Hoy le cuestionaron una supuesta amenaza proferida ante los empresarios.

¿Hacia dónde apunta Guillier? Su dirección está difusa.

¿Necesitará un GPS?

Como Condorito, exigiría una explicación.

Pero que la política está loca….es que está muy loca.

¿Hasta cuándo resistiremos?

¿O somos los Ciudadanos que no sabemos elegir y exigir?

Que el mundo cristiano  rece por Chile en Semana Santa.

En el intertanto, les invito a leer mi penúltima columna publicada  en el Semanario “Tiempo” sobre el oficialismo de campaña del piñerismo y los aprontes  de  las restantes tiendas políticas, un tema que retomaremos en la columna de este viernes en  el Semanario “Tiempo”.

Llorar sobre la leche  derramada

Publicada en  el Semanario “Tiempo” el 24 de marzo de 2017

De nada sirvieron los reiterados piedrazos que en el cálido  verano lanzó la trinchera oficialista  al ya hoy  pre-candidato a La Moneda- dispuesto a repetirse el plato- Sebastián Piñera.

 Estaba claro que a este animal político- incapaz de satisfacerse con los US $ 2.700 millones- su fortuna según   cálculo de Forbes- no serían las acusaciones de   su indebida intrusión en sus negocios  mientras permaneció en La Moneda, las que lo harían desistir de su intención de retornar a la Presidencia.

Lo cierto que tales imputaciones representan un flanco muy débil, por una muy sólida razón: están todos en el mismo lodo con la política tan embetunada, contaminada, contagiada, infectada, percudida  y/o ensuciada (imito a Piñera) por actos e ingresos  irregulares.

Y al igual que todos los restantes pecadores de la política, Piñera  tiene la convicción que  las  máculas cometidas no le harán mella. No existe el inmaculado- ya sea con irregularidad, omisión o magnas equivocaciones- y además con respecto a  los escándalos y la reiteración de éstos, la ciudadanía  está sumida en  una suerte de adormecimiento, ya no reacciona.

Una señal de eso es el liderazgo de Piñera en las encuestas.

Pero, ojo, en los meses próximos y mientras   las Primarias no resuelvan los candidatos finales,  los resultados de los sondeos tenderán a licuarse. Han emergido nuevos postulantes, nombres que provienen de nuevas agrupaciones.

Lo amenazante de  estos nuevos rostros es que  representan la renovación o el cambio que espera  la ciudadanía y complican en particular  a la izquierda tradicional.

Piñera u otro del Derechismo representará la vuelta atrás, la Nueva Mayoría el Continuismo y la Nueva Izquierda el Cambio. Esos serán sus sellos.

Sobre esa Santísima Trinidad deberá elegir el ciudadano, si es responsable con su voto y no se deja llevar por motivaciones espurias.

Piñera estuvo de romance  con  la dirigencia de su Alianza a la que  prometió alojarles si llega a La Moneda. Deberá ahora  enamorar a los militantes.

Aunque  lo nieguen,  su suerte dependerá de cómo se mueva en las encuestas frente a un  nuevo escenario de unos  ¡15! Pre-candidatos.

Increíble: tantos dispuestos a sacrificarse  en un país que deberá recuperarse de un bajo Crecimiento, de un alto nivel de Delincuencia, de Empleos precarios y de otras  problemáticas que a esta Administración se le quedaron en el tintero: Regionalización, Descentralización, Seguridad, Previsión, Salud, Modernización del Estado y la Educación  aun pendiente.

Por lo tanto, ¿no habrá llegado la hora que la ciudadanía se ponga  seria y elija a quien plantee promesas realistas y con plazos acotados dentro de su Administración?

Para que esto ocurra hay que rechazar la repartija de besos, abrazos y selfies. Ir  informado a las  urnas para evitar luego llorar sobre la leche derramada.