El Rentable Negocio de las Secuelas Cinematográficas
Los Géneros del Terror y la Fantasía son sus principales Nichos de Negocio
En materia de películas, casi nunca segundas partes han sido mejores que la original.
Con algunas excepciones, entre las cuales la más emblemática es “El Padrino”, aunque en ese caso, cada una de las 2 secuelas y la original tienen sus propios méritos para situarlas por separado entre las mejores realizaciones secuenciadas.
De las actuales películas exitosas que han generado sucesiones no tengo referencias. Producciones como “El Sr. De los Anillos”, “Star Wars”; “Batman” y tantas otras que llegan apoyadas con un impresionante marketing, tienen su público incondicional predispuesto a disfrutar las secuelas sean buenas o malas.
Hay, sin embargo, secuencias desastrosas tras cintas como “Alien”, “Terminator” y “El Exorcista”.
Pero eso no resulta trascendente desde la perspectiva del negocio cinematográfico porque en todas las secuelas, los productores apuntan a recoger la amplia taquilla que dejó la primera versión, y esperan que su versión sucesora igualmente resultará rentable.
La cinta más emblemática en esta línea es “Pesadilla”, así como su atractivo personaje, Freddy Krueger, y la infinidad de secuelas que tienen vida y títulos propios.
En el género del terror, hay tentación por “estrujar” una producción si ésta ha tenido aun relativo éxito porque el público aficionado a esta categoría no demanda grandes realizaciones.
Basta con una propuesta más o menos creíble acompañada por efectos sonoros y visuales que provocarán la emoción que es lo que en definitiva el espectador va a buscar cuando se sienta en una butaca a presenciar una película de terror.
La narración y su consistencia, así como las consideraciones estéticas pasan a segundo plano si es que el director logró provocar en el público el miedo y el suspenso, emociones que a los asistentes le divierten porque se sitúa en un contexto de ficción.
Todo lo anterior aplica a la nueva película del director James Wan que no podía sino ser titulada “El Conjuro 2”, porque la original- que fue uno de nuestros primeros comentarios cinematográficos en estas páginas- aportó a sus realizadores un dineral sin precedentes.
Y esta segunda parte va por la misma senda. Distribuida ya en el mundo, está siendo éxito de taquilla, con público hasta dispuesto a situarse en primera fila para verla en pantalla grande.
Lo cierto es que el género de terror debe ser disfrutado en una sala de cine. Ambos “Conjuros” tienen una ventaja sobre otras propuestas y es que se sustentan en casos reales, pero eso no significa que en estos relatos no esté la mano de la ficción, y que los hechos ocurridos queden doblegados ante las concesiones propias de la estética cinematográfica.
Más que una secuela, “El Conjuro 2” responde a un serial, donde el elemento de unión con la primera producción es la pareja de investigadores de situaciones paranormales que indaga un segundo caso de relevancia en un modesto barrio inglés donde se habría instalado una fuerza sobrenatural que controla a una de los 4 hijos de una familia uniparental.
Si Wan cede a la tentadora posibilidad de una tercera versión, estaremos ante una saga.
Esta nueva película cumple su cometido, pero lo trascendente para los productores es su éxito de taquilla, que, a mi juicio, sobrepasa su relativa calidad y eso se explica porque a la fecha no hay exhibición en el género de terror que le presente competencia.
La afiatada actuación de los actores protagonistas- Vera Farmiga y Patrick Wilson- ayuda a generar la atmósfera de credibilidad en el relato. Es la misma dupla de “El Conjuro”.
Wilson- un intérprete de segundo roles- bajo la dirección de Wan en las 2 versiones, ha logrado un mejor despliegue actoral.
Farmiga logró un reconocimiento en la televisión, por su participación como la madre de Bates en el remake para la pantalla chica de “Sicosis”, la aclamada cinta de Hitchcock. La vimos también en la dramática versión cinematográfica del libro titulado “El Niño del Pijama a Rayas”.
“El Conjuro 2” la recomendamos para público de regiones, con escasas opciones válidas en la cartelera cinematográfica.
Pero reservamos nuestra mejor apuesta en el género del terror para el año próximo, cuando está anunciada la exhibición del remake de “It” una excelente cinta de terror de distribución en la televisión.
No está claro si circulará por salas de cine, pero en el intertanto, recomendamos la primera versión de esta película, cuyo eje es un payaso diabólico.
¿Algo más escalofriante que un clown cometiendo fechorías? Más aún si está inspirado en la pluma de Stephen King, el Rey del Terror.
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