Semanario “Tiempo” Junio 2013

Al concluir el primer semestre de este año publiqué una columna en Semanario “Tiempo” sobre la escasez de  producción cultural en la TV abierta a propósito que  el canal estatal puso diplomática lápida a la producción de Cristian Warnken “Una Belleza Nueva”,  al relegarlo a un horario en que virtualmente  estaba compitiendo en madrugada dominical con las misas de ese horario en un trato incoherente  con uno de los escasos espacios culturales de la tv fuera de pago.

Hace un par de meses, el programa de Warnken se  ha instalado de nuevo en la Pantalla chica en el Canal La Red que en conjunto con Banco Santander apostaron por una propuesta cultural. No me sonroja publicitar gratuitamente el nombre de ambas empresas por el mérito que tuvieron  de otorgar el espacio a esta excelente producción cultural.

Recupero entonces  la columna que publiqué en junio pasado en Semanario “Tiempo” a propósito del incumplimiento de TVN de la propia visión y misión que proclama en su página. Felicitamos a las empresas que a través de la Tv abierta han valorado lo cultural.

Nos referimos en la oportunidad a la hipócrita exoneración que hizo el Canal estatal- porque no lo suprimió sino otorgó vil horario, eso es bullying- a uno de sus escasos bastiones culturales, las entrevistas de Cristian Warnke, una de cuyas conversaciones abordé en una columna y que con mucha satisfacción señalo, fue tema de una clase de ética en un Post Grado.

El espacio fue reprogramado a las 8 hrs. en las mañanas dominicales y dejó al presentador en la disyuntiva inequívoca de renunciar.

Es la cultura acorralada, y la hipocresía con que la Televisión maneja sus propuestas  culturales.  Son Programas  confinados a horarios de escasa audiencia: de relleno, para decir que el Canal hace el esfuerzo y sacrificio de acoger propuestas culturales y sacudirse la culpa. Ya el horario dominical a las 9 AM para “Una Belleza Nueva” era mezquino, incoherente con su gran aporte, estaba desterrado de Horarios Premium. Sólo la minera regional Los Pelambres apostó a su auspicio. Bien por esa empresa. Los privados apadrinan generalmente espacios que retribuirán a sus siempre golosas arcas.

¿Quién en definitiva financia la bazofia que  difunde la televisión? Ud., porque el costo de  sueldos millonarios para rostros y el montaje de onerosas y frívolas producciones de lenguaje procaz,  sale en la práctica de los bolsillos empresariales que después retorna en el  precio que Ud. paga por sus  productos.

Cómo me gustaría pagar ese sobreprecio a una empresa que patrocinó una franja cultural  en Horario Premium.

Todos, desafortunadamente, financiamos lo que Warnken denominó “la telebasura” faranduleada por aquellos animadores que estrujan hasta sacar llanto en el exhibicionismo de la pobreza, la enfermedad y la miseria humana, el reality y la ilusión de aquellos que persiguen el banal sueño del minuto de fama en la pantalla chica.

Reviso la Orientación Programática, Misión, Visión  y  Valores del Canal Estatal.

Promete promover “el crecimiento y desarrollo personal de los chilenos en aras de su enriquecimiento emocional, cognitivo y cultural” (sic): bonita frase, tan correctita, pero no es coherente con su programación, contaminada por el mensaje insustancial. Hace muchas décadas que en Chile la cultura está rezagada. El convencimiento es que la Cultura no vende y hoy la lógica es rendirnos a apuestas que no aportan al desarrollo de quienes tienen  menor acceso al conocimiento. Ese es nuestro drama.

Que los jóvenes no simpaticen con ofertas culturales es una falacia. He asistido a Ciclos de Cine Precursor con una Sala Centenario de La Serena repleta de público juvenil.

El verano pasado concurrí a un Ciclo de Jazz subsidiado por el Consejo Regional de Cultura que convocó también a las nuevas generaciones.

Retornemos a la masividad de la Tv y su enorme influencia en comportamiento social: eso es  lo que preocupa, cuando su opción es sólo el programa liviano y a la cultura le baja el telón.

El Canal Estatal apostó sólo por la Belleza Fea. Termina traicionando y deslegitima su propia y manifiesta Orientación Programática.

Sigamos escuchando a Warnken en www.otrocanal.cl pero….¿y quienes no tienen acceso a internet? ¿Ve? De nuevo, los pobres siempre pierden.

( Columna Publicada en  Semanario “Tiempo” – Junio 2013