Resumen Semanal ( 14 al 19/10/2024)

Shakeapeare ronda por La Moneda con sus comedias de equivocaciones/ Pste. Boric optó por fustigar al Congreso por caída del Juez Muñoz que preocuparse del affaire Monsalve/Estallido Social es  un fantasma presente/Bachelet proyecta “un futuro esplendor” para Santiago si se reelige a actual alcaldesa:¿lo habrá soñado?/Se aproxima nuevo reajuste para Isapres/ Estas y otras noticias en este Resumen Semanal

No fue el mediocre rendimiento el que logró remover la primera línea del M. del Interior, sino un escándalo que dejó al desnudo los débiles cimientos con  que se enfrenta la grave crisis que vive el país. Este es un Gobierno que no encuentra la fórmula para tomar el control en la Seguridad, y sin embargo ha mantenido inamovible esa cartera, ningún funcionario de ese equipo ha debido responder por los malos resultados que se tienen, que los desconocen y los niegan por lo demás.

Pero aun la forzada salida de quien lideraba las acciones sobre el Crimen Organizado-el subsecretario Monsalve- por razones muy diferentes a las de un mal desempeño ha complicado al Gobierno que pareció resistir el necesario cambio por haber incurrido en hechos ya suficientemente difundidos y los cuales no merecen explicarse una vez más.

El episodio sí interesa desde la dimensión política y las decisiones consecuenciales que llevaron de impericia en impericia a un Ejecutivo absolutamente complicado intentando salir airoso del embrollo autoinflingido.

La mayor dificultad es que el escándalo impactó al Ministerio del cual, dada la crisis de Inseguridad que vive el país, se esperaba fuese el mejor organizado y preparado para enfrentar una crisis interna. El estupor de la Ciudadanía es que el escándalo revela improvisación, irregularidades e incorrecciones propias de practicantes.

Ha complicado al Presidente Boric; a la M. del Interior, a la vocería y a la PDI, todos cometiendo errores frente a un hecho cuya ejecución era más simple.

El mandatario debió separar al exsubsecretario en cuanto le comunicó los acontecimientos y proceder a despojarlo de su jerarquía y poder en el importante gabinete que ocupaba. Eso es lo correcto cuando altas autoridades incurren en errores de esa envergadura y cuyo Poder les permite tomar algunas  ventajas.

Esas decisiones habrían “exportado” el caso hacia los tribunales y a las decisiones que adopte la Justicia.

Nada de esas medidas de  sólido mando que debió haber adoptado el Presidente Boric tuvieron lugar: El exsubsecretario siguió ocupando el cargo, aun cuando él mismo le había advertido al mandatario que había cometido una incorrección bastante preocupante en la revisión de cámaras del recinto donde él admitió llegar “borrado”. Y en ese punto complicó a la PDI desde el Director a los funcionarios que cumplieron el cometido, que solo puede ejecutarse con una orden de Fiscalía. Además es válido preguntarse si la indagación le dio ventaja sobre la denunciante.

Monsalve pudo renunciar en los tiempos que él estimó o cuando la emisión de la noticia le obligó a ese anuncio porque el día de la dimisión tenía agenda programada todo el día. En el intervalo pudo ocupar una avioneta fiscal para cumplir una gestión personal, otra irregularidad.

En horas que Monsalve estuvo “borrado”, en Chile se registraban 37 homicidios y él ocupaba el cargo de Ministro (S) del Interior. Su “borrón” le impidió al día siguiente llegar a su trabajo, cuando tenía programada una conferencia de prensa para entregar el negro balance de Fiestas Patrias. En su lugar improvisó el subsecretario de Prevención del Delito quien incurrió  en un propio desaguisado porque dijo que los crímenes estaban extendidos “en territorialidad” y por tanto se “igualaban” sus ocurrencias.

Todo esto, por tanto, ha ocurrido en un escenario de permanente exposición  de la Ciudadanía a bandas muy bien organizadas y con cifras muy dolorosas cada semana. La Delincuencia ahora se ha focalizado en atacar a adultos mayores en una de las tantas y simultáneas variables en el cometido de sus delitos.

Así, el Caso Monsalve selló una semana intensa, adversa para el país, que evidencia la incompetencia del Ejecutivo para resolver una crisis y debe escuchar a un Presidente desconectado de estas circunstancias y más preocupado de un acontecimiento que no le concernía, fustigando al Senado por remover a un juez de la Corte Suprema. Esa escena, en instantes, cuando el mandatario conocía ya del relato del propio protagonista sobre la denuncia en curso,  da cuenta  de la impericia del Gobierno para asumir esta crisis interna y para que desde el mandatario hacia abajo no asuman el peso suficiente  que tiene la misma.

Monsalve ya no está en el Gobierno y el foco es ahora el Presidente Boric quien por voluntad propia y desatendiendo las recomendaciones de su equipo de comunicaciones, ofreció una conferencia de prensa con muy malas y confusas explicaciones que dieron cuenta del desconocimiento de antecedentes e intentado convencer a la opinión pública de haber despedido al exsubsecretario en un lapso anterior a cuando se le vio actuando aun en el cargo. Algo no calza.

Podrán parecer los anteriores detalles  baladíes. No lo son, porque es en torno a estas puntualizaciones que se construyen o destruyen las confianzas que la Ciudadanía requiere con respecto a sus autoridades.

Las críticas se han dirigido también hacia la ministra de la Mujer porque la denunciante- funcionaria subordinada del exsubsecretario- ha sido para el Gobierno una protagonista invisible, contradiciendo el discurso del Feminismo declarado del Ejecutivo pero el que al parecer opera sólo en algunas circunstancias, con ciertos matices doctrinarios y cómo comodín electoral.

Queda- tras este Caso- la sensación de un país expuesto en circunstancias extraordinarias porque pareciera que en La Moneda no hay un protocolo vinculado a un Plan de Crisis, planificación que toda empresa pública y privada, y  con mayor razón un Gobierno que administra un país, debiera operar como un sistema muy eficiente y de pleno conocimiento de las autoridades que en situaciones extraordinarias deben cumplir un rol.

La semana reciente se conmemoraron los 14 años del rescate minero- más adelante volveremos  sobre ese tema- pero lo registro aquí a propósito de un ejemplo en  cómo controlar una crisis y esa fue una crisis de muy feliz término.

¿Mueve el mapa político este feroz traspié del Gobierno cuando resta una semana para una jornada electoral? Probablemente poco, talvez aumenten decepcionados entre los neutrales y se incrementen votos blancos y nulos, pero el sector que sigue a la Izquierda, particularmente los más radicales, se mantienen fieles y lo han demostrado en todas las torpezas que ha tenido el régimen en su paso por La Moneda.

Esta es además una elección localizada, un factor sorpresa podrían ser la cantidad de independientes que se presentan aprovechando la atomización de un sistema político que no se ha modificado y que unos cuantos votos pueden permitir el lograr un escaño.

Si este affaire deja muy dañado al Ejecutivo, la proyección se manifestaría en las elecciones presidenciables con una gran mayoría de votantes no militantes ni ferverosos seguidores de Partidos Políticos que también están en  el piso de las encuestas ciudadanas.

No fue el Caso Monsalve el único golpe que recibió el mundo de la Izquierda. Ni desde La Moneda,  ni Partidos Políticos ni Parlamentarios lograron frenar la caída del Juez más influenciable de la Corte Suprema. Sergio Muñoz era la preocupación que tenía el propio Presidente Boric, un interés superior al Caso Monsalve, y también sobre esa destitución hizo un acto indebido al desaprobar muy duramente la decisión del Senado que removió al magistrado de la Corte Suprema, quien ahora no podrá ocupar cargo público por los siguientes 5 años. Se interrumpió así una carrera cuya proyección era incluso para que ascendiera por segunda vez a la Presidencia del Tribunal Supremo.

El mandatario fustigó al  Poder Legislativo por tal decisión, desconociendo la autonomía del Parlamento, acusando a los congresistas de una “oblicuidad” en el fallo senatorial. El Oficialismo, efectivamente, había denunciado una persecución del magistrado por sus sentencias, en su intento por protegerlo de la Acusación Constitucional, pero lo cierto que esa no pudo nunca haber sido una razón que moviera los 27 votos que sellaron su remoción, sino 2 actos vinculados a cuestiones éticas y de principios en la tarea judicial.

Con todo, aun queda un trazado en esta crisis de la Suprema derivada del Caso Hermosilla. Está pendiente para el juez Sergio Muñoz un proceso en el propio tribunal donde el Comité de Ética revisa las mismas razones. ¿Qué sucede si los magistrados estiman que no hay mérito? Una pregunta que busca respuesta.

Una curiosidad de este crítico paso de la Corte por el Congreso es que el Senado resolvió en segunda votación destituir a la jueza Vivanco, porque sobre ella pesaban acusaciones desde las bancadas Oficialista y de Oposición. Es la típica pelea chica de las coaliciones que tanto desprestigian y decepcionan a la Ciudadanía. En tanto, con respecto al tercer magistrado en el banquillo, Jean Pierre Matus, se resolvió que su carpeta no contaba con suficientes méritos para removerlo. ¿Fin del Episodio Supremos? No lo sabemos, aun no se han desplegado todas las conversaciones de ese ahora temido celular de Hermosilla y si el destape será completo.

5 años que van desdibujando el Estallido. Las que aun permanecen indelebles son sus  consecuencias en la puerta que abrió hacia el Crimen Organizado y el gran mensaje que recibió éste al ver cómo se descalificaban y desautorizaban al Presidente de la República y a las Fuerzas del Orden. El  estallido aun estará muy presente, mientras no logremos abatir la crisis que vivimos y no situemos en su real valor a las fuerzas policiales. En este aniversario, los 3 altos mandos, junto a un número importante de  ex funcionarios, están siendo procesados, una contradicción frente a quienes con optimismo dicen que el estallido “ya pasó” porque se siguen dando señales equívocas a los chilenos. La Fiscalía pidió esta semana arraigo nacional y firma quincenal para los tres exoficiales. En menor cuantía, grupos de violentistas salieron a protestar el día 18, pero fueron más los detenidos que en años pasados, en tanto las encuestas daban cuenta de una menor tasa de personas que admiten haber apoyado esas movilizaciones. Una señal del rechazo a esas manifestaciones. Un influyente columnista interpretaba el estallido como un carnaval, pero un carnaval es un jolgorio que deja normalmente buenos recuerdos. Este aún pesa negativamente sobre el estado del país y yo lo remitiría a una pesadilla real aun presente en la ciudadanía y en muchas personas a las que le cambió la vida.

En la columna de esta semana hicimos una regresión hacia el 2019 para revisar en qué estaba el país en esa fecha y definitivamente Chile se encontraba en  superiores condiciones a su actual desplome en Seguridad y Economía.

Por lo tanto la pregunta ya no es ¿Qué nos pasó? Sino qué nos sigue pasando, cuando debemos enfrentar las huellas aun indelebles a las que aludíamos. Y no ha sido precisamente esta semana de aniversario la que nos da respuesta a esa pregunta por los hechos acontecidos en el sector político.

Les invito a revisar esa columna:

Regresión

Semanario “Tiempo” 18/10/2024

¿En qué estábamos hace 5 años? El 18 de Octubre de 2019 se destruían 15 estaciones de Metro. Nadie imaginó la historia que derivaría de esa protesta, que se vió como una manifestación más pero tenía dos gérmenes sólidos: vandalismo y destrucción desde un sector y protestas de otro más moderado. De esas fisuras hubo un aprovechamiento desde sectores político y delincuencial cuyos 2 primeros blancos fueron las fuerzas policiales y la caída presidencial.

La historia es ya sabida, el octubrismo nos dejó una indeleble huella política presente aun hoy.

“Chile Cambió” fue una de las consignas que prendió en medio de las protestas. Es válido por tanto revisar si Chile realmente cambió.

Ya ese año afloraba la preocupación por la Delincuencia que hoy ha derivado  en un descontrol y dominio de bandas en sectores del país. En 2019 las tensiones eran por las balas “locas” y la férrea oposición del PC y el FA por aplicar al control de identidad que pretendía regularse.

En Economía celebrábamos en 2019 que las exportaciones de servicios se expandían en un 12% y llegaban a los US$ 1.000 millones; el ex de Hacienda Nicolás Eyzaguirre proponía una inyección a la vena para gatillar la Inversión con una reducción de  los impuestos corporativos en tanto Renovación Nacional buscaba destrabar la R. Tributaria para bajar gravámenes. Un escenario impresionantemente distinto a nuestra actual realidad económica.

En migraciones no enfrentábamos la oleada actual, sólo crecían las solicitudes de residencias definitivas de venezolanos, es decir, se circunscribía a un proceso ordenado, acotado.

La opción por ir tras los fondos previsionales no estaba entre los objetivos que hoy ha llegado hasta el 7° intento de rescate. El 18-0 2019 Salud daba cuenta de 37.000 pacientes terminales para quienes se estudiaba liberar esos ahorros.

En 2019 los universitarios de izquierda avanzaban en las Federaciones ocupando los liderazgos en periodos consecutivos. Hoy han sido desplazados por nuevos movimientos de Izquierda y la Derecha.

El sector construcción, hoy paralizado,  hace 5 años  presentaba un bullente mercado inmobiliario y 2 megaempresas se preparaban para edificar en enormes paños del sector metropolitano.

Sobre la base de esta revisión del antes y el ahora, es válida la repetitiva pregunta de estos días ¿Qué nos pasó?

No es posible ignorar las carencias legítimas que subyacían: la precariedad salarial en sectores de baja calificación laboral; la desigualdad que violenta cuando se observan irregularidades como colusiones empresariales entre otras prácticas.

Pero también el modelo que proyectaba ya el Parlamento de un permanente desacuerdo, recriminaciones mutuas y la corrosiva muletilla que instaló el Frente Amplio por los 30 años y su pretendido revisionismo refundacional.

Nada de eso se ha corregido y la pregunta siguiente es ¿Cómo seguir? La respuesta la tienen los políticos que deben enmendar y focalizar su tarea en el país.

Otras Noticias

Un homenaje al malogrado expresidente Sebastián Piñera se rindió en la Mina San José, en Atacama, al cumplirse el pasado 12 de octubre el 14° Aniversario en el rescate de los 33 mineros atrapados en un socavón a 700 metros bajo tierra. Quienes le acompañaban en el gabinete han recordado como él se negó a abandonar las faenas cuando algunos especialistas estimaban que tal tarea no era ya posible. Estando en esa fecha en gira por el exterior, el mandatario monitoreaba desde la distancia cómo se avanzaba. Chile saltó con este acontecimiento a las primeras planas de diarios influyentes, se logró así colaboración de equipos de ingenieria altamente especializados, periodistas de medios de circulación internacional llegaron para hacer transmisiones en directo cuando se aproximó el exitoso final. Hasta hoy se solicita el concurso de especialistas participantes en la ocurrencia de catástrofes similares. Este rescate es un ejemplo de cómo se enfrenta una crisis en circunstancias aun más adversas que las vividas esta semana y por situaciones más complejas por lo demás. El país era otro, cómo lo cambiaron. Esta no es una frase estribillo. Desde esa fecha, muchos de quienes eran oposición, hoy en La Moneda, hacían sorna del famoso “papelito” y así fueron decantando cizaña sobre un país que fue perdiendo su estabilidad, su confianza y su prestigio.

El asunto resultó al revés de lo que reprocharon en los últimos años: bastó una década para que se destruyera lo avanzado en 30 años.

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Y como si no hubiese problemas y demandas que atender, al mundo político le entró ya la “fiebre de los presidenciables”. A la candidatura proclamada el fin de la semana pasada por Vlado Mirosevic, diputado del Partido Liberal, ahora candidato por el PL, se sumó José Antonio Kast, quien anunció ir por su tercera oportunidad.

En tanto, los Demócratas informaron que su carta presidencial será la senadora Ximena Rincón, y su ex tienda, los Demócrata Cristianos, sueñan con que retorne Michele Bachelet, según el diputado Eric Aedo, quien la ve como “única carta competidora”.

A soñar todos, mientras el país se debate en conflictos.

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 El Tribunal Electoral Regional (TER) de Coquimbo acordó destituir al alcalde de La Serena, Roberto Jacob (Partido Radical) por notable abandono de deberes, al no pagar las leyes sociales de previsión y salud correspondiente a 2016-2020 que ascienden a $ 13.000 millones.

La resolución debe ser ratificada por el Tricel. El jefe comunal lleva 3 periodos consecutivos y no podía haberse repostulado pero igual queda inhabilitado para ejercer cargo público por 5 años.

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Dos nuevas querellas sumó la Fundación ProCultura por irregularidades en el destino de los fondos. Al libelo de Chile Vamos se agregó un segundo, del Partido Republicano y una tercera querella por estafa proviene de la Mina Anglo American. Esa empresa entregó recursos a la institución para el desarrollo de proyectos en regiones donde mantiene operaciones y éstos no habrían sido ejecutados. Republicanos cuestiona que los $ 1.600 millones de origen fiscal fueran cursados al comienzo del contrato en circunstancias que las partidas de dinero se liberan según la ejecución. Con todo, no hay certeza sobre el destino de los dineros.

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Un destemplado apoyo entregó la expresidenta Bachelet a la repostulación por la alcaldía de la actual edil de Santiago Irací Hassler. Debí leerlo 2 veces para constatar que entendí bien. Lo comparto porque es un ejemplo ampliamente desproporcionado de la realidad, Es tan irreal, me parece un insulto hacia los votantes. Dice textualmente la exmandataria: “Santiago avanza, sus vecinos lo saben. Avanza en seguridad, es una comuna más limpia y una comuna de cuidados. Irací Hassler ha construido una mejor vida en Santiago, una mejor vida para las familias, donde pueden disfrutar de sus parques, plazas, de sus calles,  yo confío en Irací Hassler, es vecina, conoce la comuna, sus desafíos y el maravilloso futuro que tiene Santiago”. Plop¡¡¡

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Por último 2 titulares de temas que extenderían este Resumen si los detallo. Este mes debe producirse un nuevo ajuste en los aranceles de las Isapres en cumplimiento del muy mal acuerdo a que llegó el Congreso y el Ejecutivo sobre la Ley Corta y el supuesto reembolso que los afiliados recibirán por el ajuste de la tabla de factores. Como lo dijimos en su momento, la devolución – si es que hay- entrará a un bolsillo y saldrá por el otro porque se aplicará un reajuste que podría ser de hasta un 10%. Un triunfo del Gobierno para desmantelar la salud privada.

Una segunda información para revisar con mayor detenimiento más adelante. El CAE que cambiará a FES, de acuerdo a análisis que han comenzado a publicarse, tendrá carreras cuyo pago final por el crédito será 3 veces superior al monto otorgado.

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Es todo, agradecemos su lectura y difusión a Contactos.